El afán de olvidar las crisis bancarias, la posibilidad de contagio y el empuje recesivo que todo ello podría provocar ha llevado a los mercados a lanzar el corazón más allá del obstáculo y confiar en los tiempos y métodos de intervención de las autoridades reguladoras.
Así también ayer el repunte de los índices bursátiles fue un poco más lejos, impulsado por la fuerte reacción del sector bancario, que, tras los derrapes de la semana pasada, salió al galope como un caballo azotado por su jockey.
La historia de Credit Suisse toma cada vez más los contornos de un regalo de las autoridades suizas a UBS, que subió más de un 15% entre el lunes y ayer. Un regalo tal vez necesario, porque el terror de un caso repetido de Lehman Brothers hace que las autoridades estén dispuestas a hacer cualquier cosa para salvar a un banco sistémico moribundo. También para subvertir la jerarquía de prioridades entre bonos y acciones en la atribución de pérdidas. Los bonos subordinados se han cancelado, mientras que las acciones aún conservan su valor. Una blasfemia que obligó al BCE a confirmar que se respeta la jerarquía en la Eurozona.
A los mercados también les gustó el trabajo que se está haciendo en EEUU para tranquilizar a la gente, que en la era de las redes sociales tarda unos días en cerrar las cuentas que considera en peligro y poner en crisis a los bancos menos capitalizados. Entonces se filtró que el Tesoro de la abuela Yellen planea extender la protección de depósitos a todos los bancos, no solo a los sistémicos, mientras que el gigante bancario JpMorgan Chase, que ya lidera un consorcio que ha prestado $30 mil millones al First Republic Bank, ahora también está estudiando cómo estabilizarla para evitar la quiebra.
Toda una noticia que dio alas a la recuperación de la banca europea (+4,8% ayer el índice sectorial), empujando también al alza los índices globales, en una sesión prácticamente unidireccional. Eurostoxx50 (+1,5%) prolongó el rebote hasta la media móvil de 50 sesiones, que contuvo su exuberancia y provocó un ligero retroceso final. Mayor aún fue la suba de los índices llenos de bancos, el español y el italiano, que subieron bastante más del 2%.
Wall Street abrió su sesión en gap alcista con todos los índices y continuó siempre con signo positivo y una aceleración final que hizo que el índice SP500 (+1,3%) superara incluso la cota psicológica de los 4.000 puntos. Pero no la media de 50 sesiones, que frenó sus ambiciones, al menos ayer.
Ascenso lineal también para el Nasdaq100, que casi ha llegado a probar los máximos de febrero que, de superarlos, le permitirán ser el primero en volver a plantear la tendencia alcista de medio plazo que la crisis bancaria parecía haber comprometido. .
Hoy es otro día y la atención de los mercados también cambiará, ya que la FED publicará sus decisiones de política monetaria esta noche después de la reunión del FOMC.
Las expectativas del mercado se concentran casi en su totalidad en un ajuste de tipos de 25 puntos básicos, llevándolos al fatídico umbral del 5%.
Los mercados de bonos esperaban que los temores de una crisis bancaria persuadirían a Powell & co. para frenar las subidas, pero el parche rápido que han conseguido poner las autoridades permitirá a la Fed continuar con la maniobra de subidas, añadiendo quizás unas palabras de cautela de cara al futuro, como ya hizo el BCE la semana pasada y como paliativo por las inquietudes del mercado.
Así que esta semana los futuros están de vuelta para elevar un poco la curva de rendimiento.
Las proyecciones que los miembros de la FED harán para el futuro sobre las tasas y las principales variables que influyen en las decisiones de la FED también deberán observarse cuidadosamente. Nos darán una idea de cuánto ha afectado la crisis bancaria al imaginario FED.
En cualquier caso, la FED lleva 10 días sin hablar, como es costumbre antes de las reuniones del FOMC, a diferencia de la parlanchina Lagarde, que no deja pasar un día sin alguna declaración más o menos sensata.
Por lo tanto, es necesario un poco de precaución.
Pierluigi Gerbino – Estratega del Instituto Español de la Bolsa
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