La primera sesión de la semana empezó mal ayer y aceleró los impulsos correctivos vistos el viernes pasado. No hubo buenas noticias desde Asia: los índices chinos cayeron, a pesar de los buenos datos sobre producción y balanza comercial anunciados por las agencias de estadísticas chinas. Las nuevas medidas restrictivas a las exportaciones estadounidenses de chips avanzados a países no aliados, emitidas por Biden durante el fin de semana, tuvieron el mayor impacto.
Mal comienzo también en Europa, con apertura de hueco bajista y aceleración del descenso por la mañana, mientras que los futuros americanos no parecen ofrecer ninguna esperanza de aguantar.
Wall Street también empezó mal la sesión, con una caída en la apertura del índice SP500, que llenó por completo el hueco alcista que quedó abierto el 6 de noviembre, cuando la victoria electoral de Trump inició la ola de euforia que ahora ha desaparecido por completo.
Una primera parte de sesión difícil, que sin embargo logró mantener al SP500 en 5.780 puntos, permitió a los índices europeos limitar la caída, pero no anularla. El Eurostoxx50 resumió la sesión negativa de la bolsa europea con un saldo final del -0,46%.
Pero, como suele suceder, tras el cierre europeo, Wall Street cambió de ritmo y pasó a la ofensiva, galvanizado por el discurso de Biden en el Departamento de Estado sobre la política exterior implementada por su presidencia. El presidente saliente, que mañana pronunciará su último discurso a la nación, reivindicó con orgullo los éxitos de su mandato: “Una América más fuerte que sus adversarios de lo que era hace cuatro años, económica, militar y diplomáticamente. “Estamos ganando el desafío global”, declaró.
Desgraciadamente, el electorado estadounidense tiene la opinión exactamente opuesta, ya que deja el cargo con un índice de aprobación muy bajo (37%), muy inferior al 53% que tenía al inicio de su mandato.
Pero sus palabras pueden haber ayudado a revivir Wall Street, ya que no hubo otras noticias destacables hoy. El hecho es que la segunda parte de la sesión americana permitió al SP500 recuperar todas las pérdidas iniciales y terminar ligeramente al alza (+0,16%), demostrando su capacidad para reiniciarse tras el cierre del gap. El Nasdaq100 también se recuperó, aunque el movimiento de chips es un lastre que es difícil de ignorar. El cierre del índice tecnológico en el -0,3% es menos brillante que el del SP500, pero también envía un mensaje de esperanza para la sesión de hoy, llamada a continuar el rebote para alejarse del abismo en el que se encuentran los índices estadounidenses. en la primera parte de la sesión.
Pierluigi Gerbino – Estratega del Instituto Español de la Bolsa