Instale la alarma antes de que lleguen los ladrones
La búsqueda de seguridad forma parte de las leyes fundamentales del mundo animal. El hombre, el animal más peligroso que existe, no escapa a esta regla, que es la base de la supervivencia de la especie.
En las finanzas, en los mercados, nos comportamos como los animales, incluidos los humanos, se comportan para sobrevivir. Vamos a cazar y tratamos de llevar a casa un resultado, para nosotros y para nuestras familias.
El mayor error que cometemos es creer en la seguridad. Nuestro instinto, incluso el cerebro primordial, nos induce a buscarlo. Y esto nos hace creer que la seguridad es un valor intangible pero cierto: y ahí está el error.
¿Te acuerdas del 2000? ¿Estabas ya en los mercados en 2007? ¿Has visto el declive provocado por el miedo al Coronavirus, el mayor ataque del siglo a nuestra seguridad?
Teníamos una certeza estúpida: esto no nos pasa a nosotros. No pasa en nuestro país. Estamos fuera de eso. Una arrogancia idiota, si lo piensas bien. Cuando escuchas a alguien decir que el coronavirus “nos lo trajeron los chinos”, entiendes que nuestro problema es ese: la arrogancia de sentirnos seguros.
Como en la burbuja de Internet, como en el desplome de las hipotecas de alto riesgo, el Coronavirus ha puesto una bomba de tiempo debajo de los mercados.
La bomba estalló, dolió, atacó la seguridad de muchas cuentas.
Luego llegó la enfermera de la Cruz Roja para consolar al gran paciente: llegaron los Bancos Centrales y restablecieron nuestro deseo de seguridad. ¿Qué puede ser más seguro que un banco central? ¿Sí, qué?
Y así, terminamos creyendo en los Bancos Centrales porque nos devuelven la sensación de seguridad que hemos perdido. ¿Qué haríamos sin ellos, a dónde irían los mercados sin su intervención, cómo irían el mundo, las finanzas, nuestros ahorros, nuestras cuentas comerciales si de repente el mundo se viera envuelto por una ola de inseguridad global?
La búsqueda de la seguridad es la herramienta de marketing más eficaz para convencernos de cualquier cosa y no inducirnos a pensar con libertad, libres de creencias peligrosas: por eso creer en la seguridad es un error. Es un error vital, nos convierte en víctimas de la manipulación, todo lo que nos digan se vuelve sacrosanto si eleva nuestro nivel de seguridad.
Solo hay una seguridad real. Y es tu capacidad para pensar. Libre pensamiento, digo. ¡Piensa libremente!
Pensar libre es creer en el Conocimiento y la Cultura: porque es el Conocimiento y la Cultura lo que te hace libre.
Ante este panorama, traemos un Webinar en el que nuestro trader y estratega del Instituto Español de la Bolsa, Carlos Guayara, el próximo jueves 13 de agosto a las 18:30 (hora España) en el que nos explicará como encontrar oportunidades en los mercados durante las crisis. Un evento de lujo que no te querrás perder. ¡Acompáñanos!
Maurizio Monti
editor
Traders Magazine ItalyInstituto Español de la Bolsa
PD: Un famoso fabricante de alarmas fundó su comercial sobre una familia que pedía que se instalara una alarma después de que robaron su casa. Y la empresa dice: es el caso más común. Nuestro “sentido de seguridad”, el “no me sucederá a mí”, es solo eso. Es la arrogancia de la seguridad. Para vencer a los mercados, necesita alarmas antes y no después de sufrir daños. Necesita una base sólida de cultura financiera, la única forma de dominar y gobernar la sensación de seguridad y no dejarse dominar por ella. Haga clic para obtener una oportunidad de gran cultura para compartir juntos.
Este texto fue originalmente escrito en italiano y traducido al español por Leonor Roquett, periodista coordinadora del Instituto Español de la Bolsa.